martes, 6 de enero de 2009

Sé puntual, o sino...

El párroco se estaba retirando después de 25 años a cargo de la parroquia y los feligreses decidieron ofrecer una cena de despedida en su honor.

Se escogió a un destacado político local, miembro de la parroquia, para dar un pequeño discurso durante la cena. Pero se retrasó y el sacerdote decidió entonces decir unas breves palabras mientras esperaban al político.

"Obtuve mi primera impresión sobre esta parroquia en la primera confesión que debí escuchar. Pensé que había sido destinado a un lugar terrible. La primera persona que entró a mi confesionario me dijo que había robado un televisor y que, al ser detenido por la policía, casi había matado al oficial.

… Había robado dinero a sus padres, sustraído mercancía de su sitio de trabajo, había tenido un romance con la esposa de su jefe y tomaba estupefacientes. Yo estaba anonadado...

… Pero a medida que pasaban los días, me di cuenta que la gente de esta parroquia no era nada así y que ciertamente había venido a una comunidad llena de gente buena y amable...".

Justo cuando el sacerdote terminaba sus palabras, el político entró al salón, disculpándose por la tardanza. Inmediatamente comenzó su presentación y el discurso en honor del párroco saliente.

"Nunca olvidaré el primer día que el Padre llegó a nuestra parroquia", dijo el político.

"De hecho, tuve el honor de ser el primero en confesarme con él"

Moraleja:
NUNCA LLEGUES TARDE... ... APRENDE EL VALOR DE SER PUNTUAL


7 comentarios:

Brie dijo...

Toma ya!! XD Buena moraleja, sí señor!

Gaby dijo...

Excelente consejo. jajajajaja

Chucho dijo...

Desde ahora seré puntual hasta para comentar ;)

Zeleste dijo...

jajaja...
eso le pasa por llegar tarde ;D

El_Sonriente dijo...

Muy Buena Moralja como siempre y el chiste de abajo me partio de la risa XD.

Saludos.

Carpincho dijo...

ES TRISTE...

:-(

AGH ! HA JA JA JA HA JA JA JA HA JA JA

Warrior dijo...

A pues con esto me queda bien aprendida la moraleja Jejeje.